Amor de pareja... Vale la pena

¿Haz amado realmente a alguien en tu vida de una manera que nunca pensaste amar?
¿Haz sentido ese palpitar que se acelera cuando estas a punto de ver a esa persona amada y que culmina en una sinfonía de gozo al estar en los brazos de esa persona?
¿Haz vivido la tristeza de sentir a esa persona lejos y no tenerla cerca y las ganas de volverla a ver?
¿Haz llegado a los índices más bajos de tontería por pensar todo el día en alguien?

El amor entre pareja es demasiado complicado ya que son dos culturas que se encuentran y que se fusionan en una, pero aún así no hay experiencia en la vida más bella que el amar de verdad. Sin embargo, el amor poco a poco se apaga en este mundo porque cada día las personas se dejan llevar más por los afanes de la vida.

Lastimosamente, hoy en día vivimos en una sociedad que cada vez mas se envuelve en trivialidades y corrupción. Es triste ver que los odios, rencores y desmanes se incrementan y traen consigo separaciones, amarguras y tristezas.

Muchas personas buscan el amor verdadero. Pero pocos son concientes de la importancia de luchar por el amor. Pero para saber si es importante luchar por amor es bueno saber si realmente vale la pena amar.






Amar muchas veces duele, a veces es más doloroso que una patada en el hígado, pero es más doloroso nunca encontrar el valor para decirle a esa persona amada lo que tú sientes. Pero si esto pasa no seas tan sordo para no escuchar las palabras de amor de aquella persona que te las dice desde su corazón. Nunca digas adiós si todavía puedes tratar. Nunca te des por vencido si todavía puedes seguir luchando por el amor. Nunca le digas a una persona que ya no la amas si no puedes dejar de amarla aunque las circunstancias te quieran decir lo contrario. El amor se basa en el corazón y no en las circunstancias. Cuando hablo de circunstancias no me refiero a que esa persona te haga la vida imposible y te llene de maltratos físicos y emocionales, me refiero a aquellas situaciones provocadas por terceros que interfieren entre ese amor y tú.

Por eso, para que haya amor en la pareja debe haber respeto. Antes era común ver a un grupo de mujeres compitiendo quien de todas tenía el morado o el hematoma más grande. Esa época quedó atrás y las mujeres de hoy en día han aprendido que son valiosas y no tienen porque sufrir de abusos de parte ningún hombre que “dice” que las ama. “Porque te quiero te aporreo” es una mentira vil y despreciable. Cuando amas de verdad no maltratas al ser amado. Tristemente existen hombres que no saben valorar ni conocen el hecho de que la mujer es un vaso frágil y se dedican a despreciarlas. En cierta ocasión una pareja se encontraba en el bosque y encontraron el pozo de los deseos, el esposo lanzó una moneda y pidió su deseo. Luego la mujer, al intentar lanzar su moneda se tropezó y calló dentro del pozo y dijo el tipo: ¡Esto si funciona!

Si amas y el amor que te ofrecen es igual de sincero al tuyo, no cometas el error de dejarlo ir. El amor llega a aquel que espera, al que es paciente y fija su mente y su corazón en el amor. El simple hecho de experimentar este sentimiento puro, te llena el alma. Cuando hay amor, las parejas se desviven por hacer sentir a su pareja feliz y a la vez, al ver a tu pareja feliz te sientes realizado.

Amar vale la pena... por amor se resuelven problemas, por amor se buscan alternativas y soluciones aunque parezcan imposibles de alcanzar, por amor nace un niño, por amor curamos enfermos mediante la fe, por amor se transforman vidas y por amor fue que Jesucristo derramó su sangre por nosotros.

Basa tu vida en el amor y no en los miedos y prejuicios. Del amor nada malo puede surgir, porque el amor viene de Dios y a Él ha de regresar.

Cuando dos personas se casan es una cuestión de pareja, de los dos. Ante esto terceros no pueden inmiscuirse en los asuntos que le competen a los dos. Una forma de ver la palabra “casados” es “casa – dos” casa para dos (mientras llegan los hijos) Cuando se invitan a los suegros y a los cuñados a la vida de pareja vienen las complicaciones.

Cuando busques a esa persona con la que vas a pasar el resto de tus días, hazlo con libertad de desición. Eres tú al fin y al cabo quién vivirá con esa persona.

Dos amigos hablaban de sus planes para el futuro:
–Pues yo estoy buscando novia para casarme, pero no sé que hacer, porque a mi madre no le gusta ninguna de las chicas que le he presentado.
-Pues entonces busca una chica como tu madre y preséntasela.
-Ya lo hice, pero no le gustó a mi padre.

Pero ¿como sabes que vale la pena amar y luchar por amor?
Para hacerlo responde a ti mismo las siguientes preguntas y date cuenta por ti mismo si vale la pena amar:

¿Aquella persona tiene una relación personal con Dios?
¿Ese amor es el que más te quiere, que está al tanto de ti y que aún seria capaz de dar su vida por tu felicidad?
¿Aquella persona tiene un amor profundo y verdadero por ti, incondicionalmente?
¿Es capaz de hacerte sonreír gracias a su sentido del humor, es agradable estar con esa persona?
¿Ese amor tiene mayor empatía contigo y tú con él, que a pesar de sus diferencias sientes que están hechos el uno para el otro?
¿Te atrae en varios aspectos? ¿Su manera de ser, su físico... hay algo que te llame mucho la atención, sus ojos quizás, su cabello, su color de piel?
¿Ama a los niños y consideras que sería un buen padre o madre para tus hijos?
¿La comunicación es fluida, se comparte lo bueno y lo malo con respeto sin intención de ofender cuando se discuten temas puntuales?
¿Es esa persona como le pediste a Dios como la persona ideal para ti?

Si las respuestas a la mayoría es un sí, sabrás que sí vale la pena amar. Pero recuerda que si vale la pena amar, también vale la pena luchar por el amor. A fin de cuentas son mayores los beneficios que obtendrás al amar. Incluso trae sanidad tanto física como en el alma. Un sabio médico dijo una vez: "He estado practicando la medicina durante más de 30 años y he recetado muchas cosas. Pero tras estos años he aprendido que lo que más ayuda a un ser humano, la mejor medicina, es el AMOR".

¿Y qué pasa sino funciona?...
¡DOBLA la dosis!
AMAR VALE LA PENA.




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